Desde su nacimiento el surrealismo se presento como un movimiento revolucionario. Bretón quiso unir lo privado y lo social, la rebelión de los sentidos y del corazón -encarnada en su idea del amor único- con la revolución social y política del comunismo. Fracaso y hay ecos de ese fracaso en las páginas de L'amour fon, uno de los pocos libros modernos que merece ser llamado eléctrico
Octavio Paz en "La llama doble"