(…) Según la tipificación del propio Aristóteles los gobiernos difieren entre sí por el número de sus gobernantes, pero esto no afecta sustancialmente sus virtudes. Es irrelevante si son pocos o muchos quienes toman las decisiones; lo importante es que los gobernantes actúen de acuerdo con la Ley que da cuerpo a la comunidad. Teniendo en cuenta estas consideraciones, Aristóteles brinda un modelo racional de análisis según el cual divide a los gobiernos por dos criterios: cualitativo y cuantitativo. Del cruce de ambos deduce la existencia de gobiernos buenos y malos que pueden estar regidos por uno, poco o muchos mandatarios. El resultado podría organizarse en el cuadro siguiente:
Criterio Cuantitativo | Buen Gobierno- a través de leyes (Gobiernos Rectos) | Mal Gobierno- a través de decretos (Gobiernos Desviados) |
Gobierno de uno | Monarquía | Tiranía |
Gobierno de pocos | Aristocracia | Oligarquía |
Gobierno de muchos | República | Democracia |
(…) Como vemos, de acuerdo con lo anterior, la democracia esta concebida como una forma de gobierno desviado, es decir, aunque sus gobernantes son muchos, o los más, su espíritu no es el de la preservación del bien común, sino el de la obtención de beneficios particulares. Por ello, sus mandatos se ciñen a la Ley, sino que están expresados en decretos, frutos de una coyuntura, y dictados para satisfacer los intereses de los miembros de la asamblea.
Fragmentos de "Género y Democracia"
De Estela Serret