El mito de la belleza no habla para nada de las mujeres. Habla de las instituciones de los hombres y de su poder institucional. Las cualidades que en un periodo determinado representan la belleza en las mujeres son meramente símbolos del comportamiento femenino que en ese periodo se consideran deseables. En realidad, el mito de la belleza siempre está prescribiendo comportamientos y no apariencia. La competencia entre las mujeres ha formado parte del mito para dividirlas. La juventud y (hasta recientemente) la virginidad han sido “bellas” en la mujer porque representan ignorancia sexual y falta de experiencia. El envejecimiento en las mujeres no es “bello” porque las mujeres se vuelven más poderosas con el tiempo. El eslabón entre las generaciones de mujeres tiene que ser continuamente roto: las mujeres viejas le temen a las más jóvenes, las jóvenes le temen a las viejas, y el mito de la belleza trunca para todas el conjunto de la vida femenina. Más urgentemente la identidad de la mujer debe ser fundamentada en la “belleza” para que permanezcamos vulnerables a la aprobación exterior, llevando el órgano vital y sensible del amor propio expuesto al intemperie. "
"El mito de la belleza" de Naomi Wolf
No hay comentarios:
Publicar un comentario