lunes, 21 de enero de 2013

El mito del andrógino

El Banquete esta compuesto por varios discursos o elogios del amor pronunciados por siete comensales. Muy probablemente representan las opiniones y puntos de vista corrientes en aquella época sobre el tema, salvo el de Sócrates, que expresa las ideas de Platón Destaca el bello discurso de Aristófanes Para explicar el misterio de la atracción universal que unos sienten hacia otros, acude al mito del andrógino original. Antes había tres sexos: el masculino, el femenino y el andrógino, compuesto por seres dobles. Estos últimos eran fuertes, inteligentes y amenazaban a los dioses. Para someterlos, Zeus decidió dividirlos. Desde entonces, las mitades separadas andan en busca de su mitad complementaria. El mito del andrógino no solo es profundo sino que despierta en nosotros resonancias también profundas: somos seres incompletos y el deseo amoroso es perpetua sed de completud. Sin el otro o la otra no seré yo mismo. Este mito y el de Eva que nace de la costilla de Adán son metáforas poéticas que, sin explicar realmente nada, dicen todo lo que hay que decir sobre el amor. Pero no son una filosofía y responden al misterio del amor con otro misterio. Además, el mito del andrógino no toca ciertos aspectos de la relación amorosa que para mi son esenciales, como el del nudo entre libertad y predestinación o entre vida mortal e inmortalidad.

Octavio Paz en "La llama doble"

2 comentarios:

  1. En efecto un mito poético, pero difícil de realizar, por la misma complejidad del ser humano, es cierto que somos libres de decidir sobre nuestras vidas, luego entonces, ¿qué pasa cuando un ser humano no se decide por lo erótico, amoroso y sexual?

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  2. Es realmente poético. La mejor representación actual de este mito la recuerdo gratamente con la canción "The Origin of Love" de la película "Hedwing and the angry inch", te la recomiendo mucho. Está en YouTube.

    Por otra parte, la pregunta me parece sumamente difícil de concebir. Puedo entender que una persona sea asexual pero eso no elimina de facto el autoerotismo o incluso el amor propio.

    Podría pensar que incluso las personas con nulos deseos eróticos y sexuales, e incluso amorosos hacia su propia persona tendría que manifestar ese amor hacia los animales, las plantas, la naturaleza.

    Anular los tres elementos, que para Paz son dos, amor y erotismo, sería anular la vida misma.

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