viernes, 21 de diciembre de 2012

Ateísmo

Los pensamientos y las emociones humanas surgen de interconexiones de entidades físicas extremadamente complejas dentro del cerebro. Un ateo, en este sentido de naturalista filosófico, es alguien que cree que no hay nada más allá del mundo natural y físico, que no hay ninguna inteligencia creativa sobrenatural escondiéndose detrás del Universo observable, que no hay un alma que dure más que el cuerpo y que no hay milagros —excepto en el sentido de fenómenos naturales que todavía no comprendemos—. Si hay algo que parece que está más allá del mundo natural tal como hoy imperfectamente se conoce, esperamos conocerlo finalmente e incluirlo dentro de ese mundo natural. Lo mismo ocurre cuando somos capaces de identificar por separado los siete colores del arco iris: eso no hace que sea menos maravilloso.

Richard Dawkins en "El espejismo de Dios"

No hay comentarios:

Publicar un comentario